martes, 15 de febrero de 2011

No es suficiente.

Días de frió, soledad en las esquinas. Gente disfrazada, caretas y marionetas, muñecos de trapo, de madera, y hojalata como aquel personaje de que no tenia corazón. Menuda suerte la mía, de no ser una de ellos. Si, no soy tan ignorante, ni tan tremendamente horripilante. Aunque un día podrían engañarme, ponerme unos hilos y ser su marioneta. Si eso pasa, me cortaré los hilos, no me dejare ser manipulada. Siento, siento, y siento pero no actuó, ¿Arrepentimiento? Quizás. Digo, digo y digo pero al final todo se queda en nada. Y tu tonto, tonto, tonto otro más de la manada. Y yo chillo, grito, silbo, ladro, rujo, a todo el mundo, pero una sola voz no es suficiente para que oigan.




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